Las personas se dividen en dos tipos: a algunas les gusta la papilla de trigo sarraceno espesa y viscosa, mientras que a otras les gusta que se desmenuce.
Este trigo sarraceno ruso, conocido y popularmente querido desde tiempos inmemoriales, nos llegó desde Bizancio, por eso también se le llama cereal griego, y su tierra natal son las regiones montañosas en las fronteras de lo que hoy es India y Nepal.
Es más fácil para quienes gustan de las gachas espesas y viscosas. Es más fácil de preparar, pero con las cosas desmenuzables la cosa es un poco más complicada.
Muchos cocineros determinan "a ojo" la cantidad de agua necesaria para cocinar cereales.
Otros chefs utilizan proporciones estándar. Por ejemplo, para el trigo sarraceno desmenuzable, se considera que la proporción ideal es la siguiente proporción de agua y cereal: por una parte de cereal, tome de 2 a 2,3 partes de agua.
Sin embargo, los cocineros prácticos lo hacen de otra manera. Determinan las proporciones ideales no con gafas, sino con los dedos.
Los cocineros utilizan el viejo método, que ayudó a las generaciones mayores y sigue ayudando a los cocineros modernos.
La idea es sencilla: verter agua dos falanges del dedo por encima del nivel del trigo sarraceno. Esto es suficiente para preparar gachas desmenuzables.