El repollo blanco guisado es bueno por sí solo, sin embargo, si le agregas especias y reemplazas el agua con otro líquido simple, quedará aún más sabroso.
El cilantro molido, la pimienta negra y el comino transforman el plato en una guarnición vibrante para carnes rojas o en una delicia por sí solo.
En la versión clásica, se acostumbra verter repollo picado con agua y sazonar con pasta de tomate.
Los chefs franceses modificaron ligeramente la receta. Conservaron todos los ingredientes clave pero reemplazaron el agua con pepinillos encurtidos.
Para 700 g de col blanca, utilice 300 ml de líquido.
Los franceses complementan el repollo guisado con tocino o salchichas en rodajas. No está prohibido utilizar ambos ingredientes al mismo tiempo. Estos productos hacen que el plato terminado sea aún más jugoso y sabroso.
En lugar de vinagre normal, los cocineros añaden vinagre de vino tinto. Otro ingrediente popular entre los cocineros franceses es la mostaza de Dijon. Complementa armoniosamente el sabor agridulce del repollo y las salchichas asadas.