La salsa de carne es un plato clásico que combina bien con pasta, patatas, arroz y otras guarniciones.
Algunos trucos te ayudarán a mejorar el sabor de este plato; la salsa resultante será espesa, impresionantemente tierna y suave.
Prepara la carne, puedes coger pollo, y cortarla en trozos para freírla hasta que esté tierna y dorada. Agregue cebolla previamente picada a la carne.
Revuelva suavemente la harina en 200 ml de agua para evitar la formación de grumos y luego continúe cocinando a fuego lento la carne y la cebolla, agregando esta agua y harina.
Después de hervir, reduzca el fuego al mínimo y cocine a fuego lento tapado durante unos 20-30 minutos.
Agrega especias a tu gusto y en la cantidad que prefieras.
Añade 1 cucharadita de mostaza a 150-170 g de crema agria y revuelve hasta que esté cocido. Combine la mezcla terminada con la carne en una sartén y continúe cocinando a fuego lento hasta que hierva.
Después de 10 minutos, la salsa terminada se puede retirar del fuego.
Lo más destacado de esta receta es la mostaza, que le da a la salsa un sabor brillante e inusual. La mostaza hace que la salsa sea sedosa, de textura suave y suave.
Puedes aumentar la cantidad de mostaza si quieres que la salsa tenga un sabor más fuerte.
Un sencillo consejo le ayudará a preparar un plato increíblemente sabroso y saludable a partir de ingredientes naturales.