Para muchos, saborear el café de la mañana es un procedimiento necesario para recargar el cuerpo y sacudirlo después de un largo sueño.
El hábito arraigado de tomar una taza de café después de cenar permite quedarse en la mesa y charlar, comentar las últimas novedades y relajarse después de un día duro.
Sin embargo, no todo el mundo sabe lo saludable y sostenible que es su querida tradición.
Para aquellos que tienen problemas para conciliar el sueño rápidamente, desconfianza excesiva y ansiedad, tomar café a última hora de la noche no será beneficioso. La bebida puede aumentar su tiempo de vigilia.
Si bien el café puede ser beneficioso para la energía durante el día, por la noche contribuirá a los trastornos del sueño, especialmente si se bebe una taza de café fuerte muy tarde.
Si es un ávido bebedor de café y no puede imaginar su vida sin esta bebida, entonces una taza de café por la noche debe estar presente en su dieta a más tardar 6 horas antes de acostarse. En este caso, tienes todas las posibilidades de dormir tranquilo.
La bebida se considera una opción más segura para el consumo nocturno. Sin embargo, las personas demasiado sensibles a la cafeína deben evitar tomar café antes de acostarse.
Un sueño reparador es muy importante para su salud general y debe tomarse en serio.