Quienes almacenan patatas en el balcón deben recordar que los tubérculos se pueden congelar y esto no solo cambiará el sabor del plato terminado. También sucede que es mejor no cocinar una verdura congelada.
Cómo entender que las patatas están congeladas y qué se puede cocinar con ellas.
Al almacenar patatas surgen dos problemas principales: los tubérculos se congelan o brotan. En el intervalo entre estos fracasos, los tubérculos pueden comenzar a pudrirse, marchitarse, etc., pero todo esto es consecuencia de violaciones de la tecnología agrícola y las condiciones de almacenamiento.
La forma más segura es llevar los tubérculos sospechosos a la casa y dejarlos a temperatura ambiente. Después de un par de horas, solo tienes que intentar cortar las patatas; si el color del interior no ha cambiado, puedes comerlas. Si las papas se cortaron (descongelaron) solo después de 5 a 6 horas, cuando estén terminadas estarán dulces.
Lo principal es que la verdura no empieza a pudrirse. De lo contrario, las verduras congeladas son absolutamente seguras para la salud.
La opción más adecuada es utilizar patatas congeladas para tortitas, hechiceras o babka. Es posible que al escurrir el exceso de jugo y agregar cebollas y especias a la masa vegetal, se pueda eliminar el sabor dulzón.