Hoy en día, el masaje de drenaje linfático está de moda entre la gente: una verdadera fuente de energía que limpia el cuerpo y elimina diversas dolencias.
En particular, este procedimiento elimina la hinchazón, mejora la circulación sanguínea y proporciona a la piel una suavidad y luminosidad ideales.
La principal ventaja es que no es necesario visitar un salón para recibir este tipo de masaje. Puedes hacerlo en casa.
Entre otras cosas, el procedimiento garantiza la eliminación efectiva de toxinas del cuerpo.
Sin embargo, los expertos no recomiendan combinar el masaje con el consumo de alcohol. Se recomienda beber más agua para mejorar el efecto de desintoxicación.
El masaje de drenaje linfático es un auténtico hallazgo a la hora de lucir una piel impecable.
Por ejemplo, quiero ser así en los próximos eventos especiales.
En este caso, eliminarás la hinchazón y tensarás los contornos de tu cara y cuerpo.
Además, la piel adquiere un brillo saludable y el cuerpo se vuelve visualmente más delgado.
Se recomienda realizar el procedimiento uno o dos días antes del evento para poder ver el efecto.
Los cirujanos plásticos recomiendan el masaje de drenaje linfático por las siguientes razones:
– se reducen la hinchazón y los hematomas después de inyecciones, estiramientos faciales o liposucciones;
– los tejidos cicatrizan más rápido;
– se reduce el riesgo de inflamación.
Pues bien, si estás pasando por una situación estresante, este masaje te ayudará a relajarte y recuperar la luminosidad perdida de tu piel.
También aliviará el insomnio y solucionará el problema del metabolismo lento y la acumulación de líquidos.
Este tipo de masaje también es valioso para quienes quieren perder peso, aunque no quema grasa.
La mejor opción es un masaje con cepillo seco.
Este enfoque activa el sistema linfático, exfolia las células muertas y mejora el estado de la piel.
En caso de hinchazón severa, los expertos recomiendan realizar un masaje de drenaje linfático una vez cada 1-2 semanas hasta que aparezca el efecto.
Con fines preventivos, el procedimiento puede realizarse una vez al mes.
Después de las operaciones: sólo por recomendación médica.
Las personas con enfermedades crónicas o problemas con el drenaje linfático también deben consultar con el médico sobre este tipo de masaje.