Cada año, al 1,7% de la población mundial se le diagnostican diversos tipos de enfermedades del sistema urinario.
La salud renal de una persona depende en parte de su dieta.
El artículo le dirá qué comer para mantener la salud del órgano que filtra la sangre.
Solo el sistema circulatorio de los riñones tiene más de 160 km de vasos. Durante el día, el órgano bombea 180 litros de sangre, limpiándolo de toxinas.
Gracias a su trabajo, el cuerpo mantiene el equilibrio hídrico y normaliza la presión arterial. El daño conduce a urolitiasis, intoxicación del cuerpo, alteración del sistema nervioso central, hipertensión, aterosclerosis y diabetes tipo 2.
Las restricciones dietéticas varían individualmente. Sin embargo, existen sustancias que se recomienda excluir a todas las personas con enfermedad renal:
• fósforo debido a una disminución en la capacidad de los riñones para eliminarlo del cuerpo;
• potasio, que provoca hiperpotasemia, causa de patologías cardíacas;
• sodio, que provoca agitación, sudoración y micción frecuente.
Fuente de grasas poliinsaturadas, proteínas y completamente libre de fósforo. El aceite de semilla de oliva se recomienda para personas obesas para preservar el órgano interno. El ácido oleico, que tiene propiedades antiinflamatorias, tiene gran importancia en las materias primas. Además, el aceite está recomendado para personas con enfermedades del sistema inmunológico.
Los médicos recomiendan consumir uvas rojas por su alto contenido en vitamina C, un antioxidante con capacidad para estabilizar la pielonefritis.
Los estudios científicos de las uvas han demostrado la presencia de la sustancia rveratrol, que mejora los procesos metabólicos y la inmunidad de las células renales. El manjar debe consumirse exclusivamente fresco.
Los pimientos dulces contienen muchos nutrientes valiosos, pero hay una cantidad críticamente pequeña de potasio, lo que tendrá un efecto positivo en la nutrición de los riñones. Una verdura cubre con éxito el 100% de las necesidades diarias de alfatocoferol y el 150% de ácido ascórbico. Estos componentes reducen el riesgo de inflamación de los riñones, lo que provoca aterosclerosis y diabetes. La pimienta debe consumirse exclusivamente fresca.
Un antiséptico de origen vegetal que puede proporcionar un combate eficaz contra los microorganismos patógenos. Los arándanos son una buena fuente de flavonoides que brindan protección contra la uretritis y la cistitis.
Muchos científicos recomiendan incluir bayas en la dieta de personas con antecedentes de urolitiasis. Los fitonutrientes del arándano bloquean la adhesión de bacterias a la mucosa de la vejiga, minimizando así la probabilidad de bacteriosis.
Después de investigaciones científicas, se descubrió que la planta medicinal es eficaz para reducir los niveles de colesterol en sangre y restaurar los vasos sanguíneos de los riñones.
El ajo ayuda a reducir el daño aterosclerótico a las arterias del órgano interno en el contexto del desarrollo de diabetes tipo 2. Sin embargo, debe consumirse exclusivamente fresco.
La baya normaliza la función renal, favorece la eliminación activa de piedras y arena y previene la urolitiasis.
Un producto con bajo contenido de potasio protege los túbulos de los órganos de la atrofia que aparece en el contexto de la diabetes y la hipertensión. Con la ayuda de los arándanos, puedes proteger con éxito tus riñones de los radicales libres debido a sus altas propiedades antioxidantes.
Un estilo de vida y una dieta saludables son factores clave en la salud renal. Una dieta con los productos enumerados ayudará a curar y fortalecer el órgano.