Es imposible no sentir celos del elegido. Incluso los partidarios de las relaciones abiertas pueden experimentar este sentimiento que no es el más maravilloso.
En general, esta es una manifestación completamente normal de los sentimientos humanos, incluso cuando se trata de relaciones sanas.
Sólo en algunos casos, la causa de los celos puede ser la duda.
E incluso en tales casos, puedes hacer frente a los celos y dejar de arruinar el estado de ánimo de las personas por el más mínimo motivo.
Empieza contigo mismo
No será posible reprimir por completo los celos. Ella se abrirá paso de todos modos y con fuerza redoblada.
Y entonces todo empezará a irritar, incluso una sonrisa educada de un compañero a una persona cualquiera sin una pizca de intriga.
Pregúntate por qué los celos empiezan a asfixiarte y empieza a analizar tus emociones.
Analizando cada situación en detalle, podrás comprender qué es exactamente lo que te pone celoso: tu falta de confianza en ti mismo o el comportamiento de tu pareja.
Errores del pasado
Una pareja bien intencionada puede hablar de su relación anterior.
Pero no deberías empezar a compararte con la imagen de tu ex-pareja, a buscar información en las redes sociales, etc.
Si hablar del pasado le resulta desagradable, es mejor dejar de hacerlo.
Lo mismo ocurre con los errores en las relaciones que has experimentado y ya has perdonado.
Si vuelves a esto cada vez, vivirás constantemente en el pasado y estarás celoso.
Hablar de cosas dolorosas
Si no quieres que tu pareja te dé motivos de escenas, cuéntale tus sentimientos y experiencias.
Una conversación así le permitirá evitar conjeturas y subestimaciones y hará que su relación sea aún más estrecha.
Si sigue estos consejos, podrá generar confianza, obtener el apoyo de su ser querido y ganar confianza en su relación.