El afecto de persona a persona no es la mejor cualidad que se puede desarrollar en una relación.
Los expertos dicen que esto es malo, pero rara vez explican por qué. Intentemos descubrir por qué se deben evitar tales relaciones.
Primero, independencia
Una persona deja de ser independiente y ya no comprende si puede confiar en sus propias fuerzas y experiencia.
El peligro también radica en el hecho de que en tal estado una persona deja de percibirse a sí misma como un individuo, deja de desarrollarse, sus intereses desaparecen y su círculo de contactos se reduce.
En segundo lugar, el miedo.
Es posible que una persona sea verdaderamente capaz de más. No solo gane más, sino que también logre un crecimiento profesional significativo.
Sin embargo, por miedo a terminar la relación, tiene miedo de cambiar de trabajo o aceptar otro tipo de cambios, queriendo salvar a su familia.
Pero, en realidad, en este momento el desafortunado sólo se deja llevar por sus propios miedos.
En tercer lugar, la violencia
La violencia no es sólo física. Al apegarse a una pareja y no imaginar la vida sin él, una persona está dispuesta a soportar la humillación, el ridículo y cualquier manifestación de falta de respeto.
Al mismo tiempo, los expertos creen que a menudo un sentimiento de afecto resulta cómodo para las víctimas de relaciones poco saludables.
Como mínimo, en tales condiciones no es necesario tomar decisiones y asumir la responsabilidad de los errores cometidos.
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