La mayoría de los padres prestan especial atención al potencial de sus hijos y a su futuro, pero durante la infancia su felicidad es lo más importante.
Aquí te damos 10 consejos para ayudar a tu hijo a pasar un buen rato y disfrutar cada momento de la vida.
Rodéate de familiares y amigos felices, saludables y llenos de energía positiva. Si un niño crece en una casa llena de risas, entre adultos sonrientes, esto definitivamente le afectará en el futuro.
No se obsesione con el rendimiento académico de su hijo, porque esto sólo aumenta la ansiedad en el alma del niño. ¡En lugar de eso, apoye su pasión y creatividad!
Basado en el mismo principio, hazle saber que los fracasos y los errores son parte natural de la vida y a través de ellos puede aprender más sobre la vida y aumentar su sabiduría.
Enséñele a su hijo el principio de “el vaso está medio lleno”. El optimismo sólo es bueno a largo plazo, y un niño al que sus padres mantienen en un "baño caliente" lo pasará muy mal en el futuro.
Enséñele a su hijo a sentir empatía y a desarrollar la inteligencia emocional para que no se convierta ni en acosador ni en víctima. En cambio, defenderá pacíficamente a quienes necesitan su apoyo y podrá hacer frente a su ira.
Introducir el hábito de cenar juntos es un hecho comprobado que tu hijo será más feliz, lo que también hará que esté más equilibrado emocionalmente.
Enséñele a su hijo el autocontrol, no sea demasiado irascible. Haz la prueba de la piruleta: Dale a tu hijo una piruleta y dile que si espera 15 minutos sin comerla, le tocarán dos más, luego déjalo en paz. La gratificación retrasada mejora los sentimientos de felicidad y éxito en los cerebros jóvenes.
Asegúrese de que su hijo pase mucho tiempo jugando al aire libre y no en la cama con un iPad. Como resultado, cuando un niño sale de casa, sus capacidades cognitivas se desarrollan y aprende a estar presente, que es una de las claves del crecimiento y el aprendizaje.
Cuando se comunique con su hijo, préstele toda su atención. Deja el periódico y el teléfono a un lado y escucha atentamente lo que dice. Estos cuidados hacen que los bebés sean mucho más abiertos y sociables.
Anime a su hijo a ser amable y generoso porque la ciencia también demuestra que esas personas son más felices. Puede parecer irónico que el altruismo traiga alegría, pero realmente lo hace.
Anteriormente, contamos qué padres dan a luz a los niños más inteligentes .