A los niños les encanta faltar a la escuela y quedarse en casa para descansar un poco en lugar de estudiar. Pero incluso ellos pueden aburrirse con las interrupciones en sus estudios. Esto sucede cuando dichas pausas son prolongadas y duran varios meses, por ejemplo, debido a una enfermedad.
Quedarse mucho tiempo en casa es una prueba para un adulto, que todavía puede realizar muchas actividades por sí solo. Para un niño es mucho más difícil: todavía no tiene todo en orden a la hora de organizar su tiempo, por lo que no puede hacerlo sin ayuda externa.
Las únicas personas que pueden ayudar a un niño a sobrellevar la tristeza de estar mucho tiempo en casa son sus padres. Pero muchas veces no saben qué se puede hacer.
Para no confundirse y brindar apoyo moral correctamente, puede utilizar algunas recomendaciones.
Luchar contra la ansiedad
Al estar aislado del mundo entero, es difícil no entrar en pánico porque se respira incertidumbre sobre lo que sucede fuera del apartamento. A menudo, los propios padres alimentan esta ansiedad hablando de lo terrible que es todo.
Los adultos, si se ven obligados a quedarse en casa con un niño durante mucho tiempo, no deben agravar la situación de ninguna manera. Es importante hablar de lo que es bueno, de lo que puedes estar feliz. No es necesario ocultar nada, ya que los niños lo sienten todo bien.
Debe responder las preguntas de su hijo con sinceridad, pero sin dramatizar. Al final de la conversación, vale la pena señalar que todo saldrá bien y encajará. Puedes preguntarle a tu hijo qué podría calmarlo.
Fortaleciendo la comunicación
Puede utilizar el tiempo que pasa únicamente con su familia para beneficiar su relación. Cuando todo el mundo necesita hacer recados, entonces, por supuesto, es posible que no quede tiempo para la comunicación.
Cuando tienes muchas horas para hablar y jugar, definitivamente necesitas aprovecharlas. Además de jugar juntos, pueden organizar ver películas y leer libros. Todo esto les ayudará a encontrar intereses comunes y acercarse unos a otros.
Mantener una rutina diaria
Una de las razones por las que un niño puede sufrir en casa es que todo a su alrededor se vuelve inusual. Por ejemplo, comienza a aparecer regularidad en las acciones, desaparece la necesidad de estar movilizados y activos. Todo esto conduce a la pereza, la apatía y la mala salud. Junto con todo lo anterior, la ansiedad suele aumentar.
Para evitar que esto suceda, es necesario introducir una rutina diaria obligatoria. Puede dedicar más tiempo al descanso, pero debe ser estrictamente limitado.
Nutrición adecuada
La buena salud es imposible sin una dieta equilibrada. Es por eso que no debes mimar constantemente a tu hijo con golosinas, por ejemplo, regalar pasteles y tartas. Es mejor sustituir todo esto por ensaladas y frutas.
Para despertar el interés de su hijo por la comida sana, es necesario experimentar y preparar nuevos platos constantemente.
Definitivamente necesitas mostrar con el ejemplo cómo aprovechar al máximo estar en casa. Los propios adultos deben seguir una rutina diaria y comer bien. Entonces el niño comenzará a acercarse a ellos, a hacer lo necesario para su desarrollo.