Los bielorrusos, a pesar de todos los esfuerzos de los agentes del orden, siguen engrosando las listas de víctimas de estafas telefónicas.
La única buena noticia es que cada vez son más los casos de detención de mensajeros que llegaron para cobrar dinero e indemnizar por los daños a las víctimas.
En una situación similar se encontraba una jubilada de 79 años de Baranovichi, informa el canal Telegram del Ministerio del Interior de Bielorrusia.
La mujer creyó la historia del accidente y decidió sacrificar sus ahorros para salvar a su nieta.
Los estafadores que llamaron convencieron a la ciudadana de que su nieta se enfrentaba a responsabilidad penal, que sólo podía evitarse entregando el dinero al mensajero.
El mensajero no tuvo que esperar mucho y la mujer le entregó el equivalente a casi 30 mil rublos.
Sólo gracias a las rápidas acciones del departamento de investigación criminal del Departamento del Interior de la ciudad de Baránovichi se pudo establecer la identidad del mensajero.
Pronto el propio sospechoso fue sorprendido con las manos en la masa.
Resultó ser un residente de Lyakhovichi de 20 años, quien admitió que consiguió un trabajo como mensajero a través de Internet, y que esta era la primera tarea en su hoja de trabajo.
El dinero fue confiscado al detenido y será entregado a la víctima.
Se ha abierto una causa penal por fraude.
Los agentes del orden le recuerdan una vez más que cuando reciba este tipo de llamadas, debe dejar de hablar y denunciar el incidente a la policía.
Los llamados correos asumen la responsabilidad en igualdad de condiciones con los demás participantes en el plan criminal.