Los restaurantes, bares y cafeterías suelen instalarse bajo el nivel del suelo, en sótanos y bodegas, lo que sólo beneficia a estos establecimientos.
Los restauradores finlandeses decidieron no quedarse con medias tintas y se adentraron en las entrañas de la tierra, equipando una de las minas inactivas para la restauración.
El restaurante Muru, en la localidad finlandesa de Lohja, ha entrado en el Libro Guinness de los récords como el restaurante situado a mayor profundidad.
Fue equipado a una profundidad de ochenta metros, utilizando para este propósito una de las minas inactivas de Tytyri.
Los propietarios aseguran que el establecimiento cumple con todos los requisitos de seguridad al 100%.
Además de ser inusual y seguro, el comedor subterráneo luce muy hermoso.
Quienes lo hayan visitado pueden estar orgullosos, pues el restaurante no se parece a ningún otro establecimiento del mundo.
Sin embargo, vale la pena admitir que el restaurante no es para pobres. Al fin y al cabo, sólo por un asiento en la sala hay que pagar 150 dólares.
Y los cocineros de aquí lo dan todo, ofreciendo a los visitantes filetes en flores de acacia, ternera joven, corégono ahumado y otras delicias.
Quienes lo deseen podrán realizar una excursión y descender hasta una profundidad de 350 metros.