El aceite vegetal es uno de los productos más populares: lo utilizamos para preparar muchos platos.
Se utiliza para algo más que freír.
Usamos aceite para condimentar ensaladas, hacer aditivos para platos hervidos y usarlo para hornear. Dado que el consumo de aceite para cualquier ama de casa es bastante elevado, la cuestión del coste siempre es relevante.
Este tipo de aceite en sí no puede considerarse barato, especialmente si hablamos de un producto de alta calidad. Además, a veces los productores experimentan creando variedades únicas de aceite de oliva, lo que aumenta el coste.
El producto más caro fue el que se vendió en la subasta por más de cinco mil euros. Estamos hablando de medio litro de aceite. Su singularidad radica en el hecho de que como materia prima se utilizaban aceitunas de una planta muy antigua.
A pesar de un precio tan elevado, se vendieron más de 130 litros de aceite.
Mucha gente cree que este aceite se utiliza sólo con fines cosméticos. Esto está mal. Lo que pasa es que el coste del aceite de argán comestible es tan alto que es poco probable que tenga una gran demanda.
El producto se vende únicamente en Marruecos, donde se fabrica.
Por una botella estándar de aceite hay que pagar unos 1.500 dólares.