¿Quieres complacer a alguien que conociste recientemente?
¡Es mucho más fácil de lo que parece a primera vista!
Basta utilizar algunas técnicas psicológicas sencillas.
Empecemos por el "truco" más sencillo. ¡Sonrisa!
Sonreír es una forma segura de ganarse la confianza y la buena actitud de los demás.
Pero no te excedas. Una sonrisa debe evocar sólo emociones positivas en su interlocutor. No hagas que tu sonrisa parezca estúpida, no la conviertas en una sonrisa.
Además, no dejes que tu interlocutor se sienta ridiculizado.
Pero puedes reírte de ti mismo. E incluso necesario.
No dudes en mostrar tus debilidades y admitir tus errores. Muestre una actitud tranquila hacia sus propios defectos.
Este comportamiento casi siempre cautiva a la gente.
Y no olvides dirigirte correctamente a tu interlocutor.
Utilice los pronombres “usted” y “usted” con menos frecuencia y pronuncie los nombres de las personas con las que habla con más frecuencia.
A casi todas las personas les gusta escuchar su propio nombre. ¿Por qué no aprovechar esto?