Algunas mujeres evitan deliberadamente usar ropa de colores brillantes, mientras que otras no pueden imaginar la vida sin ellas.
Los científicos se apresuraron a comprender este problema y descubrieron una fuerte conexión entre el color de la ropa y la inteligencia de una mujer.
Resultó que las mujeres que no demostraron los puntajes más altos en las pruebas de coeficiente intelectual prefieren los colores brillantes y saturados.
A las mujeres se les ofreció ropa de diferentes colores para elegir. Tenías que elegir lo que más te gustara.
A continuación, era necesario pasar pruebas para determinar las habilidades intelectuales, resolver problemas de pensamiento lógico, evaluar la memoria y las habilidades analíticas.
Los colores brillantes y saturados fueron elegidos por mujeres que mostraron bajos resultados en las pruebas.
Las damas con vestidos de colores discretos y discretos demostraron altos resultados.
Presumiblemente, las mujeres con un coeficiente intelectual alto conocen y siguen las normas y reglas de comportamiento, se consideran profesionales y, por lo tanto, intentan comportarse con moderación.
Sus oponentes de investigación con vestidos brillantes son los menos preocupados por este tema y también se les considera más expresivos.
Pero los científicos advierten que sus hallazgos son simplemente un reflejo de una tendencia estadística.
Debido a una serie de factores y excepciones, se requiere más investigación.