Cualquiera conoce la situación en la que, al conocer a una persona, su rostro comienza a parecerle familiar, pero no puede recordar este encuentro.
Los científicos llaman a este fenómeno el fenómeno de la “cara familiar”. Ahora se sabe por qué sucede esto.
La investigación sobre este tema fue realizada por científicos estadounidenses en Los Ángeles.
Si has cometido un error o te has confundido con alguien, no debes culpar todo a tu mala memoria. Ella casi no tiene nada que ver con eso.
Si se encuentra en una situación similar, no se preocupe por adivinar, sino que acepte inmediatamente el hecho de que hay un extraño frente a usted.
El fenómeno ocurre en el momento en que una persona estudia el rostro de un transeúnte al azar.
En este momento, los procesos asociados con recordar información ocurren en un área del cerebro llamada amígdala.
Al mismo tiempo, se activan procesos en el hipocampo, que es responsable del procesamiento de datos y la formación de la memoria.
Es decir, el cerebro humano está configurado para recordar, reconocer y buscar rostros similares en la memoria.
El fenómeno se explica por el hecho de que el cerebro identifica los rasgos generales de un extraño con los rostros de otras personas que ha conocido anteriormente. Y esta función funciona en segundo plano.
Y si aún no recuerdas dónde viste a este extraño, ten por seguro que se trata de un hecho absolutamente normal.