¿Necesita una determinada cantidad de dinero, pero le da vergüenza pedirla prestada?
¿Tienes miedo al rechazo? ¿No quiere empeorar su relación con la persona a la que pretende acudir en busca de ayuda?
¡Entonces aprende sobre un interesante truco psicológico!
Hay un truco muy interesante. Consiste en la sobreestimación inicial de la cantidad requerida.
No te apresures a pedir la cantidad de dinero que realmente necesitas.
Primero, aumente esta cantidad 2-3 veces. Y aún más.
Existe una alta probabilidad de que lo rechacen. ¡Está bien! El hecho es que el segundo intento probablemente tendrá éxito.
En esta etapa, indique exactamente la cantidad que realmente desea pedir prestada.
Así es como se finge una “concesión”. Lo más probable es que tu amigo acepte ayudar.
Al fin y al cabo, tras una negativa previa por su parte, esta persona puede sentirse culpable.
Y luego le pidieron una cantidad más razonable. Seguramente habrá ganas de acudir al rescate. La técnica psicológica funciona en la mayoría de los casos.