Muchas amas de casa limpian las cucharas con una toalla inmediatamente después de lavar los cubiertos.
Sin embargo, esta acción se considera de mal augurio.
Según la creencia popular, secar las cucharas puede provocar graves dificultades en la vida.
En primer lugar, estamos hablando del ámbito monetario.
Se cree que un ama de casa que limpia con frecuencia las cucharas lavadas puede sufrir una pérdida de dinero.
No se pueden excluir consecuencias como la pérdida de trabajo y fuentes de ingresos, así como gastos inesperados y graves.
La situación puede llegar al punto en que la familia se empobrezca.
Es aconsejable deshacerse de la costumbre de secar las cucharas con un paño.
Los cubiertos lavados deben colocarse inmediatamente en un vaso: deje que las gotas caigan de los propios utensilios.
Si aún es necesario limpiar las cucharas, entonces debe usar una toalla no inmediatamente después de lavar los cubiertos, sino al menos un par de horas después de completar el procedimiento.
Anteriormente contamos por qué cae un tenedor y explicamos cómo anular el efecto de un mal augurio.