Mucha gente sabe que el invierno no es la mejor época para iniciar reformas.
Por supuesto, hay muchas razones racionales para no iniciar las reparaciones durante este período, pero ¿alguien ha pensado en los signos y supersticiones existentes al respecto?
En la sabiduría popular existe la creencia de que las heladas invernales no son el mejor momento para renovar una casa.
Se dice que con ese trabajo la suerte se congelará y la familia puede enfrentar dificultades.
Por lo tanto, incluso las reparaciones menores en el hogar pueden provocar fallas.
Algunas personas supersticiosas creen que los días de invierno son una época en la que la luz penetra con dificultad en la casa y el trabajo puede provocar una falta de luz en la vida familiar.
Esta prohibición tiene una explicación completamente racional, porque sin luz solar, escasa en invierno, es difícil realizar reparaciones.
Un aspecto que se puede tener en cuenta es el efecto de las bajas temperaturas sobre los materiales de construcción.
Mucha gente cree que las heladas pueden afectar la calidad de las reparaciones.
E incluso si se utilizan materiales de construcción especiales, es posible que la situación mundial no cambie.
Las pinturas y barnices son una parte integral de las reparaciones. ¿Pero qué pasa si el invierno los convierte en elementos helados?
Existe la opinión de que las pinturas pueden perder calidad en invierno. La prohibición en la realidad moderna tiene poco que ver con la realidad, porque las pinturas modernas pueden soportar bajas temperaturas.
Sin embargo, su tiempo de secado definitivamente aumentará, y esto hay que tenerlo en cuenta.
Algunos argumentan que las renovaciones invernales pueden afectar el ambiente de su hogar.
No ventilar una habitación puede generar energía "fría".
Además, debido a las reparaciones durante este período, pueden comenzar conflictos insolubles dentro de la familia.
Anteriormente nombramos 6 elementos interiores que pueden atraer la buena suerte.