Hace relativamente poco tiempo que se ha popularizado la tradición de resumir el año.
Algunos incluso lo hacen públicamente, en las redes sociales.
Sin embargo, es mejor hacerlo solo.
No tiene sentido mentirse a uno mismo, por lo que honestamente sacará conclusiones objetivas. Qué has logrado, qué éxitos te han acompañado.
Pero es necesario registrar no sólo los aspectos positivos. Sea honesto acerca de sus fracasos. Esto ayudará a protegerse contra ellos en el futuro.
Los expertos señalan que la gente está acostumbrada a esforzarse por lograr más, pero a veces no hay suficiente motivación para ello. Resumir puede cumplir este papel.
Si no ha logrado nada impresionante, puede mejorar la situación el próximo año.
De todos modos, durante el año tuviste una experiencia positiva. Si está de mal humor en diciembre y tiene los primeros signos de depresión, un recordatorio de su propio éxito puede levantarle el ánimo.