La presencia de daños menores en una moneda no significa que el billete no será aceptado para el pago.
Pequeños rayones, abrasiones e incluso dobleces no indican que el dinero carezca de señales de pago.
Sin embargo, las supersticiones populares no recomiendan gastar esas monedas.
Los billetes ligeramente dañados se utilizan mejor como talismán o amuleto.
¿La moneda estaba rayada o doblada? Guárdalo para ti.
Según la creencia popular, ese dinero puede traer buena suerte y felicidad a la vida de su dueño.
Se cree que el uso de una moneda dañada como talismán aumenta las posibilidades de riqueza.
Además, un billete de este tipo puede proteger a una persona del mal de ojo y del daño: el dinero puede recibir un "golpe".
Pero para que el amuleto sea realmente efectivo, debe guardarse en un lugar determinado y para que nadie más vea la moneda.
El lugar ideal para guardar un talismán de este tipo es el compartimento de la cartera, que casi siempre permanece cerrado.