El carisma son cualidades de liderazgo. Casi todos los líderes son carismáticos.
Que cuanta más responsabilidad y cualidades de liderazgo asume una persona, más los demás lo ven como una persona carismática.
Intuitivamente entendemos que algunas personas nos atraen más que otras, dice Alexey Maksimchenkov , un destacado mentor empresarial para aumentar las ganancias en San Petersburgo (según la revista Expert), profesor y fundador de la Escuela de Negocios Maksimchenkov, el proyecto " Business Focus", emprendedor, inversor desde 2007.
Los antiguos griegos interpretaban el carisma como un "regalo de Dios". Esta definición no ha perdido su relevancia hoy, ya que muchos todavía creen que el carisma es un don natural "de arriba", que se les da a algunos al nacer, mientras que otros nunca están destinados a recibirlo.
Sin embargo, el carisma es una habilidad adquirida que se puede desarrollar del mismo modo que, por ejemplo, aprender un idioma extranjero o la capacidad de conducir un coche.
El carisma es importante para un gerente. El tipo de gestión carismática es una forma eficaz de liderar su negocio y a sus empleados en general. El carisma viene con habilidades que ayudan en la gestión y en la vida.
Los oradores más carismáticos son aquellos que pueden aportar significado a una conversación a través de historias y comparaciones interesantes. Normalmente, cuando hablan de algo, utilizan expresiones faciales, lenguaje corporal y entonación de voz para enfatizar los puntos clave.
El resultado es una historia interesante y comprensible que puede captar la atención de cualquier persona. Esta es la razón por la que las personas carismáticas suelen ser oradores públicos exitosos.
Sin embargo, las personas carismáticas son amadas no sólo por su estilo atractivo, sino también por la forma en que hacen sentir a los demás. Además de su capacidad para hablar, los oradores carismáticos pueden crear una atmósfera relajada y amigable a su alrededor.
Las personas se sienten mejor en tales condiciones, lo que las motiva a regresar en busca de nuevas comunicaciones y cooperación.
La forma más rápida de volverse más carismático es practicar constantemente. El carisma no es un flujo, sino una consecuencia. Se presenta como algo secundario, una ventaja para las acciones y el comportamiento de una persona.