Desde el punto de vista de la quiromancia, las personas nacen con cierta predisposición a la riqueza.
Te contamos por qué signos puedes determinar que una persona está destinada a ser rica.
Los palmistas consideran que un dedo meñique largo (por encima de la línea de la curva superior del dedo anular) es uno de los principales signos de predisposición a la riqueza.
Si, al cerrar la mano en un puño, no hay espacios entre los dedos, el dinero de la persona no “fluirá entre sus dedos”.
El tercer signo de predisposición a la riqueza es una línea de suerte claramente definida (la que va hasta la mitad del dedo medio).
Sin embargo, si la línea de la suerte termina en un tenedor o un tridente, la riqueza llegará a una persona solo en la vejez.