La música juega un papel muy importante en la vida de muchas personas: estamos acostumbrados a que las composiciones nos ayuden en momentos difíciles, se conviertan en el fondo durante las fiestas amistosas o estén asociadas a determinados acontecimientos de nuestra vida.
Resulta que este es un enfoque muy correcto.
Si, después de una situación desagradable, intenta aliviar la tensión con la ayuda de una “pausa musical”, entonces esta es una buena solución. Los expertos han descubierto que sus composiciones favoritas pueden reducir los efectos negativos del estrés.
Puedes elegir música clásica para que el efecto sea más pronunciado.
Muchos han notado que algunos deportistas no pueden imaginarse entrenar sin música. Se ha demostrado que esto reduce los niveles de fatiga.
La música también te permite completar más tareas en un solo entrenamiento, lo que también es una consecuencia de la reducción de la fatiga.
Tocar instrumentos tiene el mejor efecto sobre la función cerebral, pero escuchar música también tiene un efecto positivo.
Por eso, durante una sesión de lluvia de ideas, conviene hacer una pausa de diez minutos para escuchar música y evaluar el resultado.