Hay varias razones que hacen que un niño se muerda las uñas o se muerda la piel alrededor de la uña.
En tales casos, los padres amenazan con untarse los dedos con mostaza y la solución al problema no va más allá.
Los expertos aseguran que todo esto es señal de ansiedad, estrés u otro problema de carácter emocional.
1. Los niños pueden hacer esto porque tienen problemas para dormir. Puede que les persiga algún tipo de miedo o ansiedad, motivo por el que se despiertan por la noche.
2. Otra razón es la inestabilidad emocional, que también se manifiesta por cambios de humor.
3. Los conflictos que surgen en la familia también afectan el estado emocional del niño.
Entonces el hábito de morderse las uñas le ayuda a aliviar el estrés.
4. Las preocupaciones por el bajo rendimiento escolar y el acoso también pueden desencadenar la aparición de un hábito.
En primer lugar, los padres deben comprender el motivo de la posible aparición del hábito y eliminarlo.
En segundo lugar, puedes hablar tranquilamente con tu hijo sobre lo que le deprime, le preocupa o lo que más le teme.
En tercer lugar, si logró descubrir el motivo, para eliminar el hábito, proponga una actividad para el niño con la ayuda de la cual desviará su atención.
En situaciones difíciles, es necesario buscar la ayuda de un médico o psicólogo.