A veces los niños realizan determinadas acciones con demasiada lentitud.
Por ejemplo, muchos niños tardan mucho en vestirse antes de ir al jardín de infancia o salir a caminar.
Algunos niños y niñas dedican demasiado tiempo a intentar volver a colocar todos sus juguetes en su sitio.
¿Quiere que su hijo se vista más rápido o que ponga orden en la habitación de los niños lo antes posible?
No es necesario que le levante la voz a su bebé y le diga constantemente: "¡Bueno, más rápido!" o "¡Llegamos tarde!"
Es mejor utilizar un truco interesante: le ayudará a lograr el resultado deseado sin gritos ni quejas.
Todo lo que tienes que hacer es coger un cronómetro y encenderlo.
Como resultado, una tarea doméstica común se convertirá en un juego interesante para el niño.
Obviamente, el bebé querrá completar tal o cual acción antes de que se acabe el tiempo.
De esta forma, prepararse para la guardería (o devolver las cosas esparcidas a su lugar) se convertirá en un proceso mucho más rápido.
Los padres acelerarán a su hijo mientras permanecen completamente tranquilos. El niño también estará contento, porque no sólo "ganará", sino que también recibirá elogios.