A los padres modernos se les enseña la idea de la necesidad de enseñar a sus hijos conocimientos financieros. Y aunque estas habilidades no se inculcan en la escuela, los padres hacen lo mejor que pueden y, por supuesto, se cometen errores.
Los expertos hablaron de los errores más comunes que cometen los padres en esta etapa.
No puedes evitar las preguntas sobre dinero que te hace tu hijo. No hay vergüenza en esto.
Los padres deben transmitirle al niño la idea principal de que siempre puede hacerle preguntas sobre finanzas.
La educación financiera no significa enseñar al niño a negarse todo, siempre que siempre haya grandes sumas en su billetera.
Es necesario explicar qué es necesario y en qué no se puede ahorrar.
Si, en respuesta a una oferta para comprar algo hermoso, bueno y útil, un niño escucha que es muy caro, desarrollará una actitud equivocada hacia el dinero.
La mayoría de las compras se realizan por impulso. Puedes ahorrar sin daño si vas a la tienda con una lista de compras. Tanto los adultos como los niños deberían saber esto.
Los niños deberían tener sus propios ahorros, aunque sean pequeños. Los fondos que hayan ahorrado se pueden gastar en fines personales. Los padres sólo pueden dar consejos.
Si surge una situación económica difícil en una familia, los padres deben solucionarla sin la presencia de sus hijos.
Permiten que el niño practique conocimientos financieros. Además, es necesario asignar dinero estrictamente una vez por semana o por mes.
Y si un niño los gasta en un día, debe comprender que la próxima reposición no será pronto.