Siempre es importante recordar que el egoísmo se considera una cualidad negativa e interfiere con la construcción de relaciones saludables con la sociedad.
Esta característica se forma en la infancia y no sin la ayuda de los padres.
Por un lado, este enfoque parece ser el único correcto. Sin embargo, los niños aprenden rápidamente que sus deseos y necesidades son los más importantes.
Por eso ni siquiera piensan en las necesidades de los demás miembros de la familia, explican los expertos.
Es importante recordar que muchas cosas deben explicarse bien a los niños para que sean comprensibles. Explíquele que no solo debe pensar en usted mismo, sino también en cuidar de los demás.
Las conversaciones bien realizadas tienen un gran potencial.
Si los propios adultos se comportan de forma bastante egoísta, los niños se comportarán en consecuencia. Por eso, siempre vale la pena pensar en cómo las propias acciones afectan al niño y a su personalidad.