Muchos padres (las abuelas cariñosas son especialmente culpables de esto) tienden a comprar ropa para que sus hijos crezcan.
Pero tal decisión no siempre puede considerarse razonable; para que usted pueda sacar una conclusión por sí mismo, consideremos los pros y los contras de este enfoque.
Por supuesto, la primera ventaja es el ahorro. Durante los períodos de rebajas y descuentos de temporada, puedes encontrar artículos de calidad a buen precio, por lo que comprar ropa para crecer te permite ahorrar en tu presupuesto familiar.
Además, los padres tienen la oportunidad de elegir: la gama de ropa se amplía con prendas varias tallas más grandes de las necesarias.
La principal desventaja de este enfoque es el tamaño inadecuado. Es difícil predecir cuándo a un niño le llegará la ropa comprada para crecer. El artículo puede ser pequeño o grande dependiendo de la tasa de crecimiento del niño.
Además, no olvide que la moda cambia rápidamente y que la ropa comprada para crecer puede quedar obsoleta en tan solo unos meses.
Por lo tanto, comprar ropa para el crecimiento sólo puede justificarse si se sabe con certeza que el niño crecerá con ella en un futuro próximo. En otros casos, es mejor elegir ropa que coincida con la talla actual de tu bebé.