Todo el mundo sabe que ni los padres ni los profesores pueden prescindir de conversaciones educativas.
Este es un punto importante que le permite formar el modelo correcto de comportamiento, definir los límites de la norma y establecer bases y valores aceptados.
Sin embargo, la forma de presentación del material siempre juega un papel importante, recuerdan los expertos . A veces los padres empiezan a “dar un sermón”, que se prolonga durante mucho tiempo.
Vale la pena recordar que los niños suelen tener dificultades para concentrarse. Por tanto, les resulta difícil concentrarse en su largo monólogo.
La situación a menudo se complica por el hecho de que haces digresiones y dejas de hablar del hecho.
Los niños se confunden, se pierden y generalmente pierden el hilo de la conversación. Como resultado, simplemente recuerdan que fueron reprendidos por algo. Pero no tendrá un impacto real en ellos.
Se recomienda simplemente formular inicialmente un discurso breve, comprensible y de alta calidad que valga la pena pronunciar frente al niño. Esto será suficiente.
Esta forma será mucho más efectiva.
Anteriormente hablamos de qué frases de los padres dirigidas a un niño pueden considerarse inaceptables .