Criar a un hijo es un proceso complejo en el que es fácil cometer errores.
Hay métodos educativos completos que pueden considerarse incorrectos.
Entonces, ¿qué enfoques populares están equivocados?
¿Qué métodos de educación, contrariamente a la creencia popular, no dan ningún resultado y solo dañan al bebé?
La gravedad moderada es bastante aceptable. Después de todo, a veces es necesario convencer a un niño travieso de la necesidad de realizar tal o cual acción (hacer los deberes, limpiar la habitación, etc.).
Pero no deberías ir demasiado lejos. A veces, en lugar de castigarlo, conviene simplemente hablar con el niño y, tal vez, hacer algunas concesiones.
Y no se puede castigar seriamente a un niño. Las prohibiciones temporales del uso de teléfonos inteligentes son aceptables. La intimidación y el castigo corporal no lo son.
Algunos padres temen “elogiar demasiado” a su hijo, creyendo que puede volverse arrogante.
Sin embargo, no puede rechazar por completo los elogios hacia su bebé. El niño debe ser recompensado por sus éxitos (al menos diciéndole la palabra “bien hecho”).
Un ejemplo típico: los padres obligan a su hijo a terminar la papilla, aunque él no quiere comer este plato.
Las mamás y los papás deberían abandonar este enfoque: no tiene sentido, pero pueden surgir muchos problemas.
Un niño debe tener derecho a expresar su propia opinión y participar en conversaciones de adultos, si el tema lo permite.
Si no le da a su hijo esta oportunidad, puede volverse complejo e inseguro de sí mismo.
Anteriormente, los expertos explicaron cómo revelar el talento de un niño.