La habitación de un niño es un lugar de juego, alegría y sueño tranquilo.
Pero muchos niños tienen miedo a la oscuridad, por lo que por la noche su habitación ya no les parece tan segura como durante el día.
Este problema se puede solucionar con una simple luz nocturna. Y esta no es su única ventaja.
Las ventajas de una luz nocturna en una habitación infantil son las siguientes.
En primer lugar, facilita a los padres controlar a su bebé, especialmente si se trata de un bebé que necesita alimentación nocturna. Esto es imposible en la oscuridad, pero la luz brillante puede despertar al niño. La luz suave de una luz nocturna ayuda a resolver ambos problemas.
En segundo lugar, el niño se acostumbra a la suave luz de la lámpara nocturna. Si la lámpara de noche tiene un diseño interesante (por ejemplo, con forma de conejito), el niño observará la figura que brilla suavemente y se calmará antes de acostarse.
En tercer lugar, repetimos, para los niños mayores que empiezan a tener miedo a la oscuridad, una luz nocturna les ayuda a afrontar sus miedos.
Anteriormente te contamos cómo enseñar a tu hijo a prepararse para la escuela de forma independiente.