Muchos padres dicen la palabra “no” con demasiada frecuencia.
Este deseo es bastante comprensible: quiero ir a lo seguro y prohibirle al niño realizar acciones peligrosas.
Sin embargo, un exceso de prohibiciones tiene consecuencias indeseables.
Entonces, ¿qué le puede pasar a un bebé que escucha muy a menudo la palabra “no” de mamá y papá?
Imagínate que dijiste demasiado alto y bruscamente: "¡No puedes!"
¿Qué sentirá un niño impresionable en este momento? Lo más probable es que tenga miedo.
Y si constantemente le cuenta a su hijo sobre las "terribles" consecuencias de tal o cual acción, entonces el niño puede desarrollar fobias.
¿Le prohíbes constantemente algo a tu hijo? Entonces no se sorprenda si su bebé se vuelve indeciso y comienza a subestimarse a sí mismo.
Las prohibiciones constantes aumentan el riesgo de que el bebé se enoje con mamá y papá. Esto no traerá nada bueno para la familia.
El bebé adquiere muchos conocimientos y habilidades mediante prueba y error.
Si el niño permanece inactivo, no adquirirá experiencia importante.
Muchos niños se acostumbran tanto a la palabra “no” que dejan de oírla.
Teniendo en cuenta todas las circunstancias anteriores, los padres deben prestar atención a la siguiente recomendación: si se pronuncia la palabra "imposible", debe ir seguida de una explicación de por qué no se puede realizar tal o cual acción.
Anteriormente, nombramos 6 frases que los padres amorosos nunca le dirán a sus hijos.