Perder el respeto de los propios hijos es una experiencia desagradable y dolorosa para cualquier padre.
Sin embargo, el niño reacciona de esta manera ante el comportamiento de los adultos.
Incluso los niños pequeños comprenden que a sus padres les sucede algo extraño y desagradable cuando están borrachos. Si la situación ocurre en un lugar público, a estos sentimientos se suma la vergüenza.
Por tanto, las personas que tienen hijos deben abstenerse de beber alcohol.
Los niños no entienden por qué sus padres pueden ser groseros y ridiculizarlo. Esta actitud puede traumatizar al niño. Por lo tanto, es necesario hablar correctamente con los niños.
Evite utilizar lenguaje negativo hacia ellos, especialmente si es ofensivo o duro.
Los expertos dicen que los niños deben señalar correctamente los errores y los errores, y no tratar de hacerlos reír.
No sólo los niños pueden engañar a los adultos: los padres también son propensos a presentar esta deficiencia. Un niño es sensible a las mentiras, especialmente si provienen de mamá y papá.
Por tanto, trate de ser más honesto en las conversaciones con los niños.