Muchos niños son bastante tímidos e indecisos.
A veces, los rasgos de carácter innatos se hacen sentir.
A menudo, el problema se explica por el hecho de que alguna vez el niño fue castigado por actividad excesiva.
Puedes ayudar a un niño o una niña en cualquier caso. El niño se volverá más valiente y proactivo si los padres hacen pequeños cambios en la estrategia de crianza.
El miedo al castigo es una de las razones más comunes de la indecisión de un niño.
El niño se vuelve no iniciado porque teme ser castigado por cometer un error o por molestar a los adultos.
Si el bebé es tímido, los castigos frecuentes le harán mucho daño.
Debe comprender que un niño con ese carácter ya es consciente de muchos de sus errores. Si lo regañas, la situación empeorará. El bebé se volverá más retraído.
Los padres deben convencer al niño de que puede actuar con valentía.
“Aprende a dibujar, de lo contrario...”, “Saca sólo buenas notas, de lo contrario...”, “Si suspendes, será un desastre”...
Estas y frases similares no se deben escuchar de boca de los padres.
Quizás el niño ya tenga motivación. Y la presión adicional se convertirá en un factor negativo y una fuente de miedo.
Si un niño está acostumbrado a que sus padres, hermanos, hermanas y abuelos siempre tomen decisiones por él, entonces eso no tiene nada de bueno.
Deje que el bebé se acostumbre a asumir la responsabilidad él mismo. Sí, al principio será difícil. Pero entonces el niño o la niña aprenderá a actuar de forma independiente y evaluará de antemano todos los pros y los contras de una u otra decisión.