El llanto de los niños pequeños siempre asusta a los padres, ya que a menudo suponen lo peor.
Además, debido a la histeria constante, los adultos no duermen lo suficiente, lo que afecta negativamente a su salud, bienestar y vida social.
Sin embargo, los bebés lloran por motivos muy lógicos.
La mayoría de los padres saben que los bebés pueden llorar debido a la dentición o a los cólicos. Pero estos están lejos de ser los únicos síntomas desagradables.
Los bebés pueden experimentar infecciones de oído, dolores de cabeza y problemas estomacales.
Los niños pequeños dependen en gran medida de sus padres, por lo que anhelan su atención. Si los adultos se distraen con otras actividades, el bebé puede empezar a llorar.
Es por esta razón que es costumbre recogerlos durante una histeria.
Es difícil para los niños pequeños cambiar de posición, por lo que los padres deben prestar atención a esto. Si un bebé llora, es muy posible que simplemente se sienta incómodo, dicen los expertos.