¿Tu hijo o hija es testarudo e ignora la mayoría de tus exigencias?
¡Intenta cambiar tu estilo de comunicación con tu hijo!
Resulta que la cortesía por parte de los padres y el uso de sencillos trucos psicológicos pueden convertir a un niño travieso en un buen chico.
“¡Cállate inmediatamente!”, “¡No grites!”, “¡No toques!”, “Para ahora mismo”... Los niños se acostumbran rápidamente a esos comentarios de los padres y luego comienzan a ignorarlos.
¿Quieres que tu hijo cumpla tus peticiones? Entonces deja de gritar, de reclamar y de tono exigente.
Activa la cortesía. Utilice las mismas palabras “mágicas” que alguna vez le contó a su hijo o hija.
Te sorprenderás, pero la calma y utilizar la palabra “por favor” darán buenos resultados.
A los niños no les gustan las frases: "¡Más rápido!", "¿Por qué te demoras?", "¿Cuánto tiempo puedes esperar?".
¿Es el día de tu viaje? Explíquele con calma a su hijo que hoy es necesario actuar un poco más rápido que en otros períodos.
Un punto importante: es necesario decirle al niño que la regla se aplica a toda la familia. No “tienes que darte prisa”, sino “tenemos que darnos prisa”. Al bebé le resultará mucho más fácil actuar, sintiéndose parte del “equipo”.
Existe un truco psicológico interesante que te permite obligar a tu bebé a hacer algo sin gritar.
Por tanto, debemos darle al niño el derecho a elegir.
No puedes hacer esa pregunta: "¿Vas a hacer tu tarea?"
Es mejor preguntar de esta manera: “¿Por dónde empezarás a hacer los deberes? ¿De matemáticas o de una lengua extranjera?
Este enfoque es bueno porque priva al niño de la oportunidad de negarse. Se enfrenta a un hecho: debe actuar. Pero puedes elegir por dónde empezar.
Para información
Niño : en sentido básico, una persona durante la niñez.