Si tienes un gato viviendo en tu casa, probablemente intentes prestarle la mayor atención posible.
Acariciar a tu mascota es un acto importante de interacción.
Esto ayuda a fortalecer el vínculo entre humanos y animales. Pero esta no es la única razón por la que debes acariciar a tu mascota.
El contacto con una mascota le permite aliviar rápidamente la tensión nerviosa y neutralizar los efectos del estrés. Como resultado, se calmará rápidamente y volverá a la normalidad.
Si te consideras hipertenso o tu presión arterial simplemente aumenta con regularidad, acariciar a tu gato te ayudará a neutralizar el problema.
Este hecho parece muy sorprendente, pero ha sido confirmado científicamente: el contacto con una mascota reduce en aproximadamente un tercio el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular.
Si un gato ronronea mientras lo acarician, esto tiene un efecto fortalecedor sobre el cuerpo y el sistema inmunológico. Por tanto, el contacto con una mascota es muy beneficioso para la salud.