Muchos dueños de mascotas sufren el problema del mal olor proveniente de la caja de arena de sus mascotas.
Sin embargo, existe una solución sencilla y, sobre todo, económica a este problema: utilizar carbón activado.
El carbón activado es muy poroso, lo que le permite absorber las moléculas de olor. Así, el carbón activado actúa como un potente absorbente, absorbiendo y neutralizando los olores desagradables.
Otra ventaja de este fármaco es que es seguro para los gatos.
Y todo el mundo sabe que el carbón activado está disponible en cualquier farmacia y es económico.
Puede elegir carbón vegetal en cualquier forma: gránulos, polvo o incluso almohadillas especiales llenas de carbón.
Debe colocarse al lado de la bandeja. Para una arena para gatos de tamaño mediano, son suficientes 100-200 g del medicamento.
No olvides que debes cambiar este absorbente natural cada 2-4 semanas para que realice sus funciones de manera eficiente.