Elegir un cuidador o, en términos simples, una casa de acogida para un gato es una tarea responsable que cualquier propietario tendrá que afrontar tarde o temprano.
Si no quieres preocuparte por cómo se encuentra tu mascota mientras estás fuera, presta atención a estos 5 puntos clave.
No confíes ciegamente en las recomendaciones: estudia atentamente las reseñas, tanto positivas como negativas.
Antes de traer un gato, visita personalmente el lugar donde piensas dejar al animal en acogida y evalúa las condiciones que allí reinan: limpieza, seguridad, comodidad, etc.
Durante la visita, también podrás evaluar cómo se comunica el cuidador con sus hijos.
Durante la conversación, asegúrese de averiguar si el cuidador tiene conocimientos de primeros auxilios y si coopera con las clínicas veterinarias.
Cuéntale al cuidador las características de tu mascota: su edad, carácter, nutrición y hábitos.
En este punto, usted debe discutir las formas en que se mantendrá en contacto con la persona de acogida. Quizás le ofrezcan la función de reportaje fotográfico y de vídeo: esta sería la mejor opción.
Sólo queda llegar a un acuerdo y ya puedes hacer las maletas.