Hace relativamente poco tiempo, se ha generalizado la información de que varios alimentos "humanos" representan una amenaza real para los perros.
Por lo tanto, dichos alimentos deben ocultarse lo más lejos posible de la mascota.
El chocolate contiene una sustancia extremadamente tóxica para nuestras mascotas. Lo primero que aparece después de comer chocolate pueden ser signos de intoxicación. Es necesario acudir al veterinario inmediatamente.
Los problemas renales también suelen surgir al comer chocolate, que es extremadamente peligroso.
Es sorprendente cómo una fruta increíblemente saludable para el cuerpo humano resulta tóxica para nuestras mascotas. Es necesario esconder toda la fruta: incluso la cáscara y el hueso son peligrosos.
De lo contrario, las consecuencias podrían ser nefastas.
En primer lugar, hay que tener cuidado con las intoxicaciones graves. Las enfermedades renales también suelen ocurrir cuando un perro come pasas y uvas.