Una mascota que se ha vuelto loca en su agresión puede representar una amenaza real para los demás.
Por lo tanto, todo propietario debe tomar nota de los métodos que ayudarán a calmar a un gato que silba de rabia.
Lo primero que hay que hacer es eliminar el estímulo que provocó tales emociones en el gato.
Si se trata de invitados, explíqueles que no deben tocar a su mascota en este momento. También se debe pedir a los niños que dejen al animal en paz. Incluso si la “boda” planeada causó la agresión, es mejor esperar y ofrecerle al gato otro “novio” en lugar de agravar la situación.
Intenta distraer al gato. Cualquier objeto que haga ruido al caer es adecuado para esto; por ejemplo, puede arrojar un manojo de llaves, un sonajero, etc.
Pero no intentes desviar la atención del ronroneador con la ayuda de dulces: en primer lugar, ahora no tiene tiempo para ellos y, en segundo lugar, corres el riesgo de reforzar este comportamiento con un reflejo alimentario.
La mejor manera de prevenir la agresión y obligar a tu gato a cambiar sus intenciones es utilizar los medios disponibles. Ya se ha mencionado el llavero. Pero el método más eficaz es el rociado de agua. Un chorro de agua en la cara detendrá incluso a un gato salvaje y el dueño tendrá tiempo de escapar.