Muchos dueños de gatos notan que a sus mascotas les gusta seguirlos por toda la casa.
Este comportamiento puede parecer divertido, pero detrás de él hay razones profundas relacionadas con los instintos y la psicología del animal.
Los gatos son animales que son a la vez depredadores y presas en la naturaleza. Por eso, la sensación de seguridad es muy importante para ellos.
El dueño, a quien el gato considera una fuente de protección y apoyo, le brinda confianza. Al estar cerca de una persona, el gato se siente más protegido.
Los gatos son animales sociales, aunque no en la misma medida que los perros. Necesitan atención y cariño por parte de su dueño.
Siguiendo los pasos de una persona, el gato parece decir: “Préstame atención, juega conmigo, acaríciame”.
Los gatos tienen un instinto innato de seguir a su cuidador.
En la naturaleza, los gatitos siguen a su madre para aprender a sobrevivir. En casa, la dueña asume el papel de madre.
Los gatos son curiosos por naturaleza. Se interesan por todo lo que sucede a su alrededor.
Siguiendo a su dueño, un gato puede satisfacer su necesidad de explorar su entorno.
Los gatos son muy apegados a su territorio y les gusta controlar todo lo que sucede en él. Siguiendo al dueño, el gato puede controlar lo que está haciendo y asegurarse de que todo esté en orden.
A veces un gato sigue a su dueño simplemente por costumbre. Si este comportamiento ha sido recompensado en el pasado, es posible que el gato continúe haciéndolo en el futuro.
Si tu gato te sigue constantemente, es importante responder adecuadamente a este comportamiento.
Anteriormente escribimos sobre las dos cosas que pueden hacer que un gato odie a su dueño.