Los gatos valoran tanto su territorio que no sólo son hostiles a una nueva mascota, sino que ni siquiera aceptan de inmediato a un nuevo miembro de la familia.
Muestran su carácter de diferentes maneras. Pueden comenzar a pelear y marcar muebles y propiedades. En una palabra, el gato empezará a cagar.
Los expertos nos dijeron qué se puede hacer en tal situación.
Ninguna persuasión ayudará aquí, pero cazar un gato con una zapatilla también es una pérdida de tiempo. Esta será una guerra de supervivencia.
Por lo tanto, proceda de acuerdo con el siguiente plan.
Dale tiempo al gato para que se acostumbre.
No insistas ni obligues al gato a creer que la nueva persona ha entrado en paz en casa. No invada su territorio y, si es posible, reúnase con él con menos frecuencia.
Los gatos y los gatos son criaturas bastante egoístas.
Podrás ganarte su favor mucho más rápido si les pones algo muy sabroso en las manos. Y luego una y otra vez, hasta que llegue la paz.
Si al gato no le importa tu amabilidad, no responde a las feromonas y otros aerosoles, es tímido y evita a las personas, entonces llévalo al veterinario.
Un especialista definitivamente encontrará la manera de resolver su problema.
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