No creas que basta con comprar un perro de una determinada raza para que se comporte como sólo a ti te gusta.
Aquí hay que hacer un esfuerzo y educar al animal.
Los expertos señalan que algunas razas se adaptan más fácilmente y son más susceptibles al entrenamiento, y también se adaptan un poco más fácilmente al carácter tranquilo del dueño, al que no le gusta la actividad.
Se trata de animales pacientes y hermosos que se distinguen por su tranquilidad y simpatía. Se convertirán en buenos compañeros para quienes valoran el silencio en su hogar.
Estos animales son amigos buenos y leales que se adaptan al ritmo de vida del dueño.
Pueden adaptarse a los niños, pero se sentirán más cómodos en un hogar sin ellos.
La raza se caracteriza por la paciencia y la terquedad, lo que significa que el proceso de adiestramiento puede llevar mucho tiempo.
Estos perros prefieren descansar en el sofá.
Anteriormente te contamos cómo proteger a tu perro de las garrapatas.