Los gatos se distinguen por su carácter caprichoso y su comportamiento especial. A veces puede resultar difícil establecer contacto.
Pero si sigues algunas reglas, puedes ganarte la confianza del animal.
No distraigas a tu mascota mientras come, duerme o juega.
En este caso, el animal puede irritarse y percibir incluso el comportamiento más dulce como una amenaza.
Puede parecer que los gatos siempre se acercan a la única persona en la habitación que no tiene muchas ganas de acariciarlos.
Y esto es cierto. Intentar coger un animal en brazos puede llevar al resultado contrario. Debes darle tiempo al gato para que se acostumbre y se venga solo.
No debes hacer ruido ni gritar en presencia de tu mascota. Esto sólo le molestará.
Esto se puede hacer incluso por accidente si no se conocen algunas reglas.
Por ejemplo, no debes tocar los bigotes de un animal. Aún así, con su ayuda, los gatos navegan en el espacio. Además, no debes tirar de la cola de tu mascota.
Si hay niños pequeños en la casa, también se les deben explicar estas sencillas reglas.
Anteriormente te contamos cómo aprender a entender a tu gato.