Cualquiera que alguna vez haya tenido que transportar un gato en coche sabe que es una mascota poco común que puede aguantar el camino en silencio.
Muy a menudo, desde el inicio del viaje hasta el regreso a casa, el gato maúlla fuerte y constantemente. Los expertos mencionaron el motivo y dijeron cómo transportar adecuadamente a un gato.
A diferencia de los perros, cualquier movimiento resulta estresante para los gatos. No están preparados para cambiar de entorno y se sienten inseguros e incómodos en un lugar nuevo.
De ahí el fuerte maullido en un coche o en el transporte público, como señal al propietario para que regrese rápidamente a casa.
1. Lo mejor es acostumbrar a un gato a viajar desde que nace. Los animales acostumbrados a viajar no huirán ni al ver un transportín ni al ver un coche.
2. Es importante informarle a su mascota que pronto se planea un viaje. Para hacer esto, debes conseguir el transportín con anticipación y dejar que el gato se acostumbre. Puedes poner una manta adentro y poner comida.
3. El transportín debe seleccionarse en función del tamaño del animal y del clima.
4. En el coche hay que fijarlo en el asiento del habitáculo y colocar un pañal absorbente en el portabebés; no se pueden descartar aventuras en la carretera. Llevar un animal en el maletero también es mala idea.
5. Antes del viaje, no se le da de comer ni de beber a la mascota, pero asegúrese de llevar consigo un suministro de agua y un bebedero.
6. No debe haber fragancias de olor acre y fuerte en el interior del coche que puedan alertar al animal.
7. Recuerda que los gatos se asustan con los sonidos fuertes y agudos, por lo que no debes amortiguar los desgarradores maullidos con música alta. Debido a esto, el gato gritará aún más fuerte.