Casi todas las personas que deciden tener un gato en casa piensan en lo agradable que será abrazar y acariciar a un gato que ronronea.
Pero no todos los animales aceptarán tales condiciones.
El caso es que mucho depende de la raza. Algunas personas simplemente no pueden tolerar que las abracen y acaricien con frecuencia.
Estas mascotas parecen "lujosas". Realmente quieres abrazarlos y levantarlos. El gato será un compañero devoto, pero no podrás acariciarlo con frecuencia.
No le gusta que se violen sus límites personales. En respuesta, puede rascarse o morder.
Su abrigo de piel gris azulado, sus modales sofisticados y su carácter tranquilo conquistarán a cualquiera. Pero un animal tan amable puede soltar sus garras si lo molestas.
Un representante de esta raza preferirá acostarse junto a los pies del dueño que en su regazo.
Una mascota independiente y un poco excéntrica elegirá juegos y otras actividades, pero será difícil obligarlo a sentarse tranquilamente en tus brazos.