Mucha gente percibe erróneamente a los gatos como animales egoístas.
En general, se acepta que estas mascotas no confían en nadie y no sienten afecto por las personas con las que viven en el mismo apartamento.
De hecho, los peludos suelen amar a sus dueños. Simplemente no siempre es fácil de entender debido a la falta de manifestaciones obvias de tales emociones.
Sin embargo, hay una señal clara de la confianza de un gato en una persona.
¿El gato se acostó boca arriba frente a su dueño? Este es un claro motivo de alegría.
Una mascota puede realizar tal acción solo si no le teme a la persona que tiene delante y confía plenamente en ella.
Este fenómeno se puede explicar de forma muy sencilla: un amigo de cuatro patas no abrirá simplemente su estómago, que es uno de los lugares más vulnerables de su cuerpo.
Y si un gatito en esta posición también se da vuelta, entonces se deben disipar todas las dudas del dueño sobre la sinceridad de la mascota.
De hecho, en tal situación, el peludo no sólo demuestra confianza, sino que también "invita" al dueño a jugar con él.